La reciente despenalización del cannabis en distintos países ha forzado a las entidades gubernamentales a establecer procesos de prueba y regulaciones. Esto se debe principalmente a que el cannabis tiene varios contaminantes conocidos, incluidos plaguicidas, metales pesados, disolventes residuales y micotoxinas.
Adicionalmente, es necesario confirmar la cepa y probar la presencia de cannabinoides y terpenos para determinar la potencia y el efecto.
A continuación desglosamos algunas técnicas utilizadas para este análisis.
El GC-FID y GC-MS son de las técnicas más utilizadas para analizar la concentración y la estabilidad de los compuestos cannabinoides.
Si bien, el GC-FID brinda información útil sobre la estructura y la estabilidad de los cannabinoides, esta técnica está limitada debido al calor del puerto de cromatografía de gases. La presencia de calor en este sistema provoca la descarboxilación de los cannabinoides ácidos y, en última instancia, neutraliza estos compuestos.
Por otro lado, el GC-MS ha sido ampliamente aceptado como un método válido para analizar el contenido de cannabinoides tanto del cáñamo como de los productos comerciales de cannabis. Para este propósito, se ha logrado una mayor mejora de GC-MS acoplando esta técnica a la micro extracción en fase sólida con headspace (HS-SPME).
La cromatografía líquida se considera una de las técnicas analíticas más importantes para la determinación de las concentraciones de cannabinoides en la planta de cannabis. Se puede utilizar para comparar las variaciones que puedan existir entre los principales compuestos cannabinoides, así como para determinar cualquier actividad antioxidante potencial de la planta de cannabis.
El HPLC junto con un detector de matriz de diodos (DAD) es considerado uno de los métodos más eficientes. En recientes años se ha utilizado un HPLC-DAD para realizar un análisis tanto cualitativo como cuantitativo de los principales componentes del cannabis, entre los que se incluían ∆9-THC, THCA, CBN, CBD, CBDA y CBGA, junto con todos los compuestos fenólicos.
Adicionalmente, se han empleado otras técnicas analíticas para el análisis del cannabis, como espectroscopia de infrarrojo cercano o espectrometría de desorción térmica con movilidad iónica para determinar el contenido de cannabinoides en Cannabis sativa L.
En general, existen distintos enfoques analíticos que se pueden utilizar para evaluar el cannabis. Debido a que cada método analítico está asociado con su propio conjunto de ventajas y limitaciones, las entidades regulatorias deben determinar qué procedimientos exhiben el mayor nivel de precisión para fines de control de calidad.
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